El bruxismo, aunque su nombre nos retrotraiga a encantos y hechizos, es una dolencia que afecta a muchísimas personas y consiste en una rechinar, crujir o apretar constante de los dientes de forma consciente o inconsciente.
Esta afección, que está muy normalizada, puede darse mientras estamos dormidos o despiertos. Es decir, puede darse aun nosotros siendo conscientes, pues estamos despiertos y realizando cualquier tipo de actividad, o mientras dormimos, cuando el bruxismo hace que apretemos de más nuestras mandíbulas y lleguemos a ocasionarnos algún tipo de daño en las piezas dentales.
Aunque esta afección puede ser molesta y, en algunos casos, muy dolorosa, los profesionales de Doria Medina te enseñaremos hoy cómo debemos cuidar nuestros dientes y bocas para evitar que la dolencia se convierta en un mal mucho mayor. Aquí, te dejamos algunos consejos que te serán muy útiles para sobrellevarlo mucho mejor:
Identifica el bruxismo
El primer paso para cuidar tus dientes cuando tienes bruxismo es identificar la afección. Algunos signos comunes de bruxismo incluyen dolor en los dientes o la mandíbula, dolor de cabeza al despertar, dientes desgastados, fracturados o astillados, y la sensación de tensión en la mandíbula. Si experimentas alguno de estos síntomas, es importante consultar a un dentista de inmediato para un diagnóstico adecuado.
Protege tus dientes con un protector
Uno de los métodos más efectivos para proteger tus dientes cuando tienes bruxismo es el uso de un protector bucal. Este dispositivo, también conocido como férula de descarga, se adapta a tus dientes y se usa durante la noche para evitar el contacto directo entre los dientes superiores e inferiores. Esto ayuda a prevenir el desgaste dental y a aliviar la presión sobre la mandíbula.
Reduce el estrés
El estrés y la ansiedad son factores desencadenantes comunes del bruxismo. Practicar técnicas de relajación, como la meditación, el yoga o la respiración profunda, puede ayudar a reducir el estrés y, por lo tanto, disminuir la probabilidad de apretar o rechinar los dientes.
Evita Estimulantes
Evitar el consumo de cafeína y alcohol, especialmente antes de acostarte, puede ayudar a reducir la intensidad del bruxismo. Estos estimulantes pueden aumentar la actividad muscular en la mandíbula, lo que empeora la afección.
Mantén una dieta saludable
Una dieta equilibrada es fundamental para la salud dental en general. Consumir alimentos ricos en calcio y magnesio puede fortalecer los dientes y los músculos de la mandíbula. Evita alimentos duros y pegajosos que puedan dañar aún más tus dientes.
Evita morder objetos
Algunas personas con bruxismo tienden a morder objetos, como bolígrafos o lápices, durante el día. Esto puede empeorar la afección y dañar los dientes. Conciénciate para evitar esta costumbre.
Programa revisiones dentales regulares
La atención dental regular es esencial para quienes padecen bruxismo. Tu dentista puede realizar un seguimiento de la salud de tus dientes, identificar posibles problemas y ajustar tu protector bucal si es necesario. Ya sabes que en Doria Medina estamos para lo que necesites.
Considera terapia
En casos graves de bruxismo relacionado con el estrés o la ansiedad, un terapeuta o consejero puede ser útil. La terapia cognitivo-conductual puede ayudar a abordar los factores emocionales subyacentes que contribuyen al bruxismo.
Tratamiento dental
Si el bruxismo ha causado daños significativos en tus dientes, es posible que necesites tratamientos dentales adicionales. Estos pueden incluir restauraciones dentales, como coronas o carillas, para reparar los dientes dañados.
Paciencia y persistencia
Cuidar tus dientes con bruxismo puede requerir tiempo y esfuerzo. Es importante ser paciente y persistente en la implementación de estos consejos. Con el tiempo y la atención adecuada, puedes minimizar los efectos del bruxismo y mantener una sonrisa saludable.
En conclusión, el bruxismo es una afección dental común pero tratable. Con la combinación adecuada de protección dental, reducción del estrés y atención dental regular, puedes cuidar tus dientes y minimizar sus efectos en tu salud bucal. Recuerda consultar a tu dentista de confianza para obtener orientación personalizada y asegurarte de que estás tomando las medidas adecuadas para mantener una sonrisa saludable a pesar de la dolencia. En nuestra clínica, estaremos encantados de asesorarte con todo lo que necesites.
